Por OSCAR TOBÓN
Desde hace algún tiempo como aficionado al fútbol que soy, me he preguntado insistentemente ¿Dónde está la magia de la selección brasileña?, porque parece que esta se fue de vacaciones, pues el equipo del gigante del sur no juega a nada, es un equipo totalmente terrenal que no impone l categoría y el buen juego del pasado.
Yo creería que esto se debe a que la liga local es una competencia donde juegan muchos jugadores extranjeros , pues al contar los equipos con grandes presupuestos derivados de los patrocinios y la televisión, prefieren contratar jugadores ya hechos por llamarlos de alguna manera a trabajar en sus fuerzas básicas donde la inversión es mucho más alta , pues porque formar un jugador cuesta demasiado porque no solo es el trabajo que se realiza con este dentro del terreno de juego, sino todo lo que conlleva fuera de él .
Otra posible razón que está influyendo negativamente en el mal momento de los pentacampeones del mundo, es que los jugadores que salen de los equipos brasileños emigran muy jóvenes principalmente al viejo continente incluso muchas veces sin debutar en su país, por lo cual se terminan de formar futbolística y personalmente en un ambiente distinto a su cuna y esto los hace perder el sabor por llamarlo de alguna manera la picardía que tenían otros jugadores como Ronaldo, Rivaldo, y por supuesto el más grande Pelé .
En tercer lugar, diría que otro factor que influye en el mal juego la de auriverde, son los entrenadores pues estos al querer conseguir buenos resultados han olvidado por completo eso que alguna vez deslumbro al mundo y que ellos muy orgullosamente llaman “jogo bonito”, o juego bonito llevándolo al español.
Eso para ellos era su ADN, dentro del futbol mundial, y han querido cambiar ese ADN, por el europeo, pues existe la creencia errónea que todas las figuras brasileñas juegan en Europa, y por lo tanto lo más conveniente es practicar el juego de los europeos lo que están logrando con esto es castrarle al jugador su esencia.
Por último, para este servidor lo que más ha influido en los jugadores brasileños de hoy que integran el equipo nacional es su parte mental, pues por lo que percibo y veo desde afuera como aficionado, es que muchos de ellos están más metidos en el show business, por lo cual ganan fortunas y no tienen sed de gloria como si lo tenían las generaciones que los antecedieron, le pusieron al futbol del Brasil en el sitial de honor que siempre debe estar.
Nosotros los aficionados que crecimos viendo y disfrutando esta mágica forma de jugar a la pelota, pedirles a los dioses del fútbol que los cinco veces campeones del mundo vuelvan por ese juego que alguna vez nos cautivó a todos.
© Oscar Tobón