Diario Deportes/Tunja
En partido lleno de polémica y decisiones controvertidas, el Boyacá Chicó venció en casa 2×1 a Alianza de Valledupar en partido de la 19ª fecha de la Liga BetPlay DIMAYOR 2025-1, que se jugó, la noche del sábado, en el Estadio La Independencia de Tunja.
Pitó, José Ortiz, árbitro FIFA colegiado de Norte de Santander.
La crónica
Ambos equipos, luchando por mejorar su posición en la tabla y alejarse de la zona de descenso, protagonizaron un encuentro que tuvo de todo: goles, decisiones arbitrales cuestionadas, un juego detenido por protestas y un final de infarto.
Primer tiempo: Chicó pega primero
El partido arrancó con intensidad. Boyacá Chicó, jugando en casa, tomó la iniciativa y al minuto 21 encontró el primer gol. Arango aprovechó un error defensivo de Alianza y, con un remate preciso, venció al portero para poner el 1-0.
El tanto encendió a la hinchada local, mientras que Alianza, que había llegado con la intención de sumar puntos clave para salir de la parte baja de la tabla, parecía desconcertado. A pesar de algunos intentos tímidos, el primer tiempo terminó con la ventaja mínima para los ajedrezados.
Segundo tiempo: El empate y la controversia
Alianza salió con otra actitud en la segunda mitad, buscando igualar el marcador. Al minuto 62, llegó el momento que desató la tormenta: tras un tiro libre, Luis Felipe Pérez anotó el 1-1 para Alianza. Sin embargo, la jugada generó una polémica inmediata.
Los jugadores de Chicó protestaron airadamente, alegando un posible fuera de juego en el inicio de la acción.
El árbitro José Ortiz, tras ser llamado por el VAR (liderado por Nicolás Gallo), revisó la jugada, pero la falta de claridad en las imágenes de las cámaras impidió una decisión definitiva. Ortiz validó el gol, lo que desató la furia del equipo local.
Se cuestionó la actuación del árbitro Ortiz, recordando que hace unas fechas había sido protagonista de otra decisión controversial al anular un gol del Bucaramanga frente a Unión Magdalena.
Tensión y juego detenido
El empate no calmó los ánimos. Al minuto 68, el árbitro señaló otro gol para Alianza, pero nuevamente el VAR intervino, y esta vez la decisión fue anulada, lo que incrementó el malestar en ambos lados.
Para el minuto 75, la situación se tornó caótica: los jugadores de Boyacá Chicó se negaron a continuar jugando en protesta por las decisiones arbitrales, deteniendo el partido por varios minutos. La hinchada local también se hizo sentir, mientras el ambiente en el estadio se volvía cada vez más tenso.
El golpe final de Chicó
Cuando todo parecía encaminarse a un empate, llegó el momento decisivo. Al minuto 88, una jugada rápida de Chicó terminó en un penal a su favor. Los jugadores de Alianza reclamaron un posible fuera de juego en el inicio de la acción, pero el árbitro, tras otra revisión del VAR, mantuvo su decisión. Jairo Molina tomó la responsabilidad y, con un remate certero, puso el 2-1 definitivo. El gol desató la euforia en las gradas y aseguró tres puntos vitales para Boyacá Chicó en su lucha por mantenerse en la primera división.
Consecuencias y contexto
Con este resultado, Boyacá Chicó sumó tres puntos clave, mientras que Alianza se quedó con las manos vacías, complicando su situación en la tabla de promedios, donde equipos como Envigado, Deportivo Cali y los propios Chicó también pelean por no descender.
La polémica arbitral dejó un sabor amargo, especialmente para Alianza, que sintió que las decisiones inclinaron la balanza. En redes sociales, la actuación de José Ortiz fue duramente criticada, con muchos preguntándose por qué sigue arbitrando tras errores previos en el torneo.
Reflexión final
El Chicó 2-1 Alianza será recordado como un partido donde el VAR y las decisiones arbitrales fueron protagonistas tanto como los goles. Para Boyacá Chicó, la victoria es un respiro en un torneo complicado; para Alianza, una derrota que duele no solo por el resultado, sino por cómo se dio.
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