Copa América Femenina

Colombia, a derribar al gigante Brasil

Share on twitter
Share on facebook
Share on whatsapp
Share on telegram
Share on pinterest
Share on email
Share on print

Colombia no tendrá únicamente once jugadoras cuando emprenda la heroica misión de derrotar al coloso del fútbol femenino sudamericano. Unas 25.000 almas acompañarán a las cafeteras en su duelo ante Brasil por el título de la Copa América.

Favorita sobre el papel, la ‘Canarinha’ tiene en Debinha, Beatriz Zanerrato y Adriana a algunas de la mejores jugadoras del continente. Pero las cafeteras, lideradas por la prodigio Linda Caicedo, de 17 años, contarán con una marea amarilla en las gradas.

Según la Conmebol, el 100% de las entradas al estadio Alfonso López de Bucaramanga (noreste), con capacidad para 25.000 espectadores, ya están vendidas para el duelo del sábado.

El apoyo de la hinchada fue determinante en la semifinal ante Argentina, un rival que la fanaticada colombiana considera clásico, sin reciprocidad.

Los abucheos y gritos que caían sin cesar desde la tribuna contra la Albiceleste tuvieron buena parte del mérito en la ajustada victoria por 1-0.

Fue un “ambiente demasiado especial”, reconoció la portera Catalina Pérez después del encuentro. “Invitamos a todos por favor a acompañarnos el sábado, a llenarlo (el estadio) porque vamos por ese título”, dijo la golera.

Antes, durante la fase de grupos, el Centenario de Armenia y el Pascual Guerrero de Cali ya habían recibido a miles de espectadores en la que se convirtió en casi una causa nacional para las anfitrionas: ganar la primera Copa América femenina para Colombia.

Estoy “agradecida con esta gente porque sabemos que el fútbol (femenino) va creciendo. A las tres ciudades donde hemos ido, Cali, Armenia y Bucaramanga; ha sido un gran recibimiento (…) espero nos sigan apoyando y llenen el estadio”, dijo a los medios la lateral Mónica Ramos.

– Comparativa –
Los números reflejan un duelo de David contra Goliat: Brasil ha ganado siete de los ocho de las Copa América disputadas, llegó a la final de un Mundial (2007) y tiene dos medallas de plata olímpicas (2004 y 2008).

Solo Argentina ha desafiado el reinado de las ‘Verdeamarelas’ en Copa América, cuando las derrotó en la final de 2006 con el público del estadio José María Minella de Mar del Plata como escudero.

Colombia, en cambio, tiene dos subcampeonatos de Copa América (2010,2014) y solo una vez, en el Mundial de Canadá-2015, pasó de fase de grupos de una Copa del Mundo o unos Olímpicos.

La capitana cafetera, Daniel Montoya, envió un mensaje a través de los medios:

“Quiero invitar a todo el país para que nos acompañe el sábado (….) es un momento único, es la Copa América en casa, nosotros vamos a luchar y darla toda para que se pueda quedar aquí”.

Gracias a la Copa, los nombres de las convocadas empiezan entrar en la memoria de los hinchas colombianos.

También se solidarizaron con su protesta al conocer que 10 de las 23 convocadas no tendrán equipo en el segundo semestre de 2022 porque no habrá liga femenina en Colombia.

“Ellas representan una escala de valores digna de imitar”, escribió el analista Antonio Casale en El Espectador.

Montoya lo resume: “Todo el país está deseando poder alzar esa Copa”.

– Fiesta –
Hay antecedentes para pensar que para la final los anfitriones harán una fiesta en las gradas.

En la primera liga femenina, en 2017, 33.300 personas acudieron a El Campín de Bogotá para ver la final entre Independiente Santa Fe y Atlético Huila.

En su momento fue la mayor cifra de asistentes a un partido entre mujeres, solo por detrás de un Olympique de Lyon vs. Eintracht Fráncfort por Champions League en Múnich.

Dos años más tarde América de Cali convocó a 18.000 aficionados para el partido de ida de la final con Independiente Medellín. El “poderoso de la montaña” respondió con 20.000 fanáticos en el duelo de vuelta.

El pasado cinco de junio, un mes antes del inicio de la Copa América, llegó un nuevo récord: 37.100 personas vieron el clásico entre América de Cali y Deportivo Cali.

Es cierto que “en la cancha somos once contra once”, pero “los estados de ánimo son muy importantes”, concluyó Montoya con ánimo de presagio.

© Agence France-Presse
Bucaramanga