La FIFA está investigando el contrato de Carlo Ancelotti con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) debido a presuntas irregularidades en el proceso de contratación, específicamente relacionadas con una comisión de 1.2 millones de euros pagada a un intermediario, Diego Fernandes. El problema radica en que Fernandes no está registrado como agente FIFA, lo que podría violar el Artículo 11 del Reglamento de Agentes de la FIFA, que exige que los intermediarios estén licenciados para negociar contratos de este tipo.
La FIFA ha solicitado a la CBF, mediante una notificación formal, que proporcione toda la documentación relacionada con Fernandes, incluyendo contratos, comunicaciones y comprobantes de pago, con un plazo hasta el 4 de junio de 2025, justo antes del debut de Ancelotti con Brasil contra Ecuador. La investigación se centra en esclarecer el rol de Fernandes, quien acompañó a Ancelotti en su viaje a Río de Janeiro y aparece nombrado en el contrato, a pesar de no tener la acreditación requerida. La CBF ha indicado que el acuerdo se gestionó bajo una administración anterior y está bajo revisión interna, mientras que Fernandes sostiene que actuó como consultor debido a limitaciones de tiempo y planea registrarse como agente para recibir el pago correspondiente.
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