El Liverpool se adelantó 2-1 al Fulham en su semifinal de la Copa de la Liga inglesa, con la victoria de este miércoles en el choque de ida jugado en Anfield.
Fue además con remontada incluida, ya que el brasileño Willian adelantó a los londinenses en el minuto 19, antes de que los locales dieran la vuelta al partido con las dianas de Curtis Jones (68) y del neerlandés Cody Gakpo (71), en ambos casos con asistencias del uruguayo Darwin Núñez, que había empezado como suplente.
El choque de vuelta se jugará en el estadio de Craven Cottage del Fulham el miércoles 24 de este mes. El premio será jugar la final del domingo 25 de febrero en Wembley, contra el Middlesbrough (segunda división) o el Chelsea, cuyo partido de ida de semifinal acabó el martes con victoria 1-0 de los primeros.
El Liverpool sigue vivo en cuatro competiciones. Además de en esta Copa de la Liga, en la Premier League va líder después de veinte jornadas, en la Europa League está clasificado para octavos de final y en la Copa de Inglaterra para dieciseisavos de final.
En el partido de este miércoles, sin el egipcio Mohamed Salah por encontrarse con su selección para la Copa de África y en el que Jürgen Klopp hizo rotaciones, al Liverpool le costó encontrarse cómodo.
No ayudó nada ese gol inicial del Fulham en el 20, con una pérdida de balón de Virgil Van Dijk en favor del brasileño Andreas Pereira, que envió un pase en el área para su compatriota Willian, que se deshizo del acoso de dos rivales para acomodarse una posición de disparo óptimo y batir al arquero irlandés Caoimhin Kelleher.
Fue prácticamente la única acción de peligro del Fulham antes del descanso ante un Liverpool superior en el juego pero sin pólvora en ataque.
En la segunda mitad el guión cambió y, tras varios avisos, llegó el empate en el 68, con un tiro desde fuera del área de Curtis Jones, que había recibido de Darwin Núñez y cuyo disparo tocó en la espalda de Tosin Adarabioyo antes de introducirse en la portería visitante.
El segundo zarpazo del Liverpool llegó apenas dos minutos después, cuando el uruguayo Darwin Núñez envió un pase de la muerte en el área que su compañero Cody Gakpo envió de primeras a la red del Fulham (2-1, 71).
En el 86, el guardameta alemán Bernd Leno limitó los daños con una gran intervención en un disparo a bocajarro de Darwin Núñez, que no pudo ampliar la cuenta del Liverpool antes del partido de vuelta pero que revolucionó el duelo desde su entrada en juego en el minuto 56.
Tras un ritmo vertiginoso de partidos, el Liverpool tendrá ahora diez días de pausa, hasta su visita del domingo 21 a Bournemouth en la 21ª jornada de la Premier League. Tres días después será la visita al Fulham, con la misión de terminar el trabajo comenzado este miércoles.
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