El director técnico Orlando Aravena, que estaba al frente de la selección de Chile cuando se produjo el escándalo de 1989 en el estadio Maracaná, falleció a los 86 años, informó el jueves el Colegio de Entrenadores de Fútbol de este país.
“El Colegio Profesional de Entrenadores de Fútbol lamenta el deceso del destacado técnico Orlando Aravena (…), ocurrido en las últimas horas”, dice el comunicado, sin especificar el día del deceso.
Aravena dirigió a la selección chilena entre 1987 y 1989, cuando la Roja llegó a la final de la Copa América de Argentina-1987, que perdió 1-0 ante Uruguay en el estadio Monumental de Buenos Aires.
Además, dirigía esa selección cuando se produjo la mayor vergüenza para el fútbol chileno, en un partido decisivo entre Brasil y Chile por las eliminatorias para el Mundial de Italia-1990 en el Maracaná de Rio de Janeiro.
Fue el 3 de septiembre de 1989 cuando el arquero Roberto Rojas, aprovechando que había caído una bengala en su área, se hirió en la frente para aparentar que había sido lesionado por el artificio, forzar al árbitro a suspender el partido y favorecer el triunfo de Chile. Brasil ganaba 1-0 y lograba el boleto al Mundial.
Sin embargo, Rojas confesó meses después que él se había cortado con un bisturí.
Por ese escándalo, la FIFA sancionó a Chile y lo dejó fuera del proceso clasificatorio para el Mundial de Estados Unidos-1994.
En su carrera como entrenador Aravena estuvo al frente de los clubes locales Colo Colo, Audax Italiano, Universidad Católica, O’Higgins, Unión Española, Rangers, Everton, Santiago Morning y Palestino.
Antes, como fubolista, pasó por Magallanes, La Serena, Palestino, Colo Colo y Ñublense, siempre en el medio local.
© Agence France-Presse
