Por LIZETH TORRES CONSUEGRA
Junior de Barranquilla no tuvo un buen 2024 en lo deportivo. Cuatro eliminaciones (2 en Liga, 1 en Copa Betplay y 1 en Libertadores), sumado a perder la Superliga al inicio de año contra Millonarios, dejaron un sabor amargo en el año del Centenario.
Para Diario Deportes, estos fueron los 7 pecados capitales del equipo rojiblanco.
1 DON FUAD… NO HUBO GARRA
Si algo es el fiel reflejo del Junior en este año fue la nula respuesta de los jugadores a la arenga de Fuad Char, máximo accionista del Junior, en la presentación del plantel para el segundo semestre. Cuando pidió Garra y el aliento de los jugadores, la respuesta fue un silencio que fue demasiado ruidoso.
2. FALTA DE JERARQUÍA
Junior dependía del Junior para avanzar a las dos finales de la Liga Betplay. En el primer torneo, le bastaba un empate para avanzar a la Gran Final, pero perdió 2×0 con Millonarios en Bogotá. Lo mismo sucedió el pasado domingo cuando cayó con América en el Pascual Guerrero. El triunfo, combinado con el resultado que se dio en Ibagué, hacía que Junior fuera finalista pero el plantel no tuvo la jerarquía para revertir el marcador.
En la Copa Libertadores, tenía todo a favor para voltear el marcador adverso con Colo Colo en la ida, jugaba en casa, era una diferencia mínima. Pero el equipo chileno, con muy poco, derrotó al Junior 2×1 y eliminó al rojiblanco.
En Copa Betplay, hizo lo más difícil. Remontó el 2×0 con Medellín pero en los penales cayó con el cuadro de Medellín.
3. LOS REFUERZOS NO DIERON LA TALLA
De los jugadores que trajo Junior en este año, el único que se salva es Yimmi Chará. Víctor Cantillo, Rafa Pérez (quien duró más lesionado que en cancha), Bryan Castrillón, Marco Pérez, Fabián Cantillo (regresó al inicio del semestre al Unión Magdalena), Roberto Hinojosa, Andrés Colorado, Yani Quintero, Jhon Lerma no dieron la talla.
4. LAS LESIONES INOPORTUNAS
Junior tuvo un karma importante este año y fueron las lesiones. Rafa Pérez y Jermein Peña, dos zagueros centrales, se perdieron parte del año por lo mismo. Otros cayeron en problemas musculares como Bryan Castrillón, Yairo Moreno, Marco Pérez, Andrés Colorado. Esto puso por momentos en aprietos a los DT que tenían que apelar a lo que había en la nómina. Unas alternativas respondieron, otros no.
5. UN CAMBIO QUE POCO SIRVIÓ
Arturo Reyes salió de la dirección técnica y la dirigencia trajo a César Farías con la premisa de mejorar y que Junior llegara a la final. Ni se llegó a la final ni hubo mejoría en el juego. Incluso, sobrevoló en la opinión de varios que el equipo de Reyes jugaba mucho mejor. Farías puede tener la excusa de que este plantel no lo conformó. Sin embargo, en los meses que lleva el DT venezolano, solo se vio un partido bueno y fue en la vuelta de la Copa Betplay vs. Medellín.
6. EL FESTIVAL DEL DESPERDICIO
Si algo falló en demasía el Junior fue en la definición. Opciones de gol que eran más fácil anotarlas que dilapidarlas. Pero los delanteros no tuvieron efectividad. Carlos Bacca no tiene competencia en las alternativas, ya que ni Titi Rodríguez ni Marco Pérez pudieron solventar esa necesidad de gol.
7. LAS FALENCIAS DE LOCAL Y VISITANTE
El rendimiento del Junior, tanto como local como de visitante, dejó mucho que desear. En casa perdió puntos importantes como pasó con Alianza FC, en el día del “centenario” como las derrotas con Águilas Doradas y Once Caldas, esta última en Cuadrangulares Semifinales. Como visitante, en la era Farías, solo sumó 3 puntos (no contamos los concedidos por el caso del partido vs. Nacional).
La única victoria, en el terreno de juego, que tuvo Junior en este semestre como visitante fue 1×0 sobre Tolima. El DT del Junior era Arturo Reyes.
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