Por Andrés Noé Gómez
Informadores Deportivos/Barranquilla
Hay una raza de delanteros que necesita mucho tiempo en cancha para poder marcar y, a punta de eso, se vuelven goleadores, ídolos e intocables. Pero Steven Rodríguez no es así. Al ‘Tití’ le tocó en Junior estar alineado con otro estilo de delantero.
Al héroe del empate agónico en Tunja le toca es otra cara de la moneda. La del delantero que se tiene que conformar con los minutos que le dejan los dos titulares, que tiene que arreglárselas con ‘migajitas’ de minutos… y que, con eso y todo, hace goles y hasta salva partidos y sale figura.
Rodríguez suma hasta el momento cinco goles con Junior. Y no es que nunca haya sido titular, pero es que todos sus tantos los ha conseguido viniendo desde el banco de suplentes.
Seguramente que este ha sido el más significativo para un delantero que en sus registros no tiene un partido completo jugado con los rojiblancos. Es más, lo máximo que llegó a jugar con los barranquilleros han sido 45 minutos, en un partido que se perdió 1-0 ante el Tolima el 25 de septiembre de 2023.
De ahí en adelante, jugó lo que pudo. Y pásmese: su primer gol se lo hizo al Unión Magdalena, el 9 de septiembre del 2023, de penal, jugando solo 14 minutos. Ese día lo expulsaron. En el recordado 7-1.
Luego, volvió a convertir el 25 de octubre, nuevamente desde el punto blanco, al Deportivo Pereira. Victoria ese día 2-0 a domicilio ante los ‘matecañas’. Ese día jugó 15 minutos.
Otra vez vino desde el banco, para sumar 10 minutos, el 13 de noviembre de 2023, para anotar otro penal ante el Deportes Tolima, en los cuadrangulares, en partido que se perdió 3-1.
Su cuarto gol se lo anidó al Deportivo Cali, el 18 de noviembre, con 17 minutos en cancha en esa ocasión. El primero que no fue de penal. Se ganó por 3-0.
Y este domingo, llegó a su quinto tanto, saliendo del sillón de las alternativas, en lo que hasta ahora ha sido el gol que más tiempo en cancha le tomó marcar, con 22 minutos sobre el potrero del estadio La Independencia de Tunja. Hasta ahora su gol más significativo.
Hay muchos que se sostienen a punta de goles jugando partidos completos, son dignos de la confianza y por eso su compás de espera es largo. A Rodríguez le toca sostenerse con lo que puede, tratando siempre de convencer al entrenador que está listo para responder y para provechar lo que le quede.
Un suplente de oro, y no por su enorme cuota goleadora, sino por su disposición para volver en diamante los carbones que le dan.
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