AFP | Los Angeles, Estados Unidos
El Juego de las Estrellas, gran espectáculo anual de la NBA, ha perdido mucho del brillo de antaño por la falta de competitividad de los jugadores.
El desinterés de las figuras por participar en el mítico concurso de volcadas y la ausencia de intensidad en el All Star Game generaron en los últimos años aburrimiento entre el público y caída de las audiencias.
Tras experimentar con otros esquemas, la NBA recuperó el año pasado el clásico choque entre la Conferencia Este y Oeste.
Pero esta rivalidad tradicional tampoco estimuló a los jugadores, que no quieren correr riesgos de lesión en este partido de exhibición. Sin esfuerzo alguno en defensa, el Este derrotó al Oeste con el marcador más abultado de la historia (211-186).
La invención de la NBA este año es un minitorneo de cuatro equipos con dos semifinales y una final, todo en partidos cortos a 40 puntos.
Además, cada jugador del combinado ganador recibirá 125.000 dólares y los del finalista otros 50.000.
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