La española logró su anhelada presea tras 4 participaciones
AFP | Pekín
La española Queralt Castellet consiguió su ansiada medalla olímpica. La plata lograda este jueves en la prueba de half-pipe, en el snowboard de Pekín-2022, pone fin a los sinsabores de sus cuatro experiencias anteriores en Juegos de Invierno. Castellet subió al segundo escalón del podio, quedando detrás de la sensación estadounidense Chloé Kim, que conservó su título olímpico, y delante de la japonesa Sena Tomita, que se hizo con el bronce.
A la quinta fue la vencida para Castellet después de cuatro intentos fallidos, sobre todo los dos últimos Juegos de Sochi-2014 y Pyeongchang-2018,donde estaba entre los favoritas, siendo un séptimo puesto hace cuatro años su mejor resultado, mientras que en la cita rusa había sido undécima.
«Cinco Juegos es toda una vida, una carrera entera dedicada al snowboard, dedicada a un sueño de una medalla olímpica. Desde Turín-2006, que es cuando empecé, ya me puse a soñar cuando vi a las chicas en el podio y dije que yo quiero estar ahí. Es lo que me planteé y no he dejado de luchar por eso hasta hoy», afirmó Castellet a la AFP.
– Quinta medalla de España –
Valió la pena esperar para Castellet, que ha logrado a sus 32 años el ansiado metal, el quinto para España en la historia de los Juegos de Invierno.
En su primera manga, lanzándose la novena entre las doce finalistas, tras su cuarto puesto del miércoles en las calificaciones, las cosas no empezaron muy bien para la rider catalana, que con una puntuación de 69,25 se colocaba en séptima posición.
Pero la española no se desanimó y superando la presión que tal vez la había atenazado en anteriores Juegos Olímpicos, se rehízo y sus trucos del segundo ‘run’ tuvieron una ejecución perfecta recibiendo una calificación de 90,25 puntos, que la colocaba en segunda posición, detrás de los 94 puntos logrados por Chloé Kim en el primer ensayo.
Y es que la estadounidense Chloé Kim ya mostró sus intenciones con un primer ‘run’ sensacional en el que se colocó cerca del triunfo y de lograr su segundo oro olímpico tras el logrado hace cuatro años en Pyeongchang.
En su tercera ronda, Castellet hizo 78,25, pero la japonesa Tomita, que había logrado 88,25, lo que le valió el bronce, ya no la pudo superar.
«Esta medalla es más que un alivio. Ha sido un día increíble la verdad es que he empezado un poco con mal pie. Después de esa primera ronda me han venido todos los nervios, toda la presión, todos los pensamientos de lo importante que es esto para mí y sin embargo creo que me ha venido una fuerza no sé de dónde de encontrar esa ronda por la que llevo tanto tiempo trabajando», añadió Castellet.
España suma de este modo cinco medallas en su historial en los Juegos Olímpico de Invierno. Las dos primeras llegaron con los hermanos Paco y Blanca Fernández Ochoa en esquí alpino. El primero había logrado el oro en Sapporo-1972 y la segunda el bronce en Albertville-1992, ambos en la prueba de eslalon.
Y hace cuatro años, en Pyeongchang-2018, se sumaron dos bronces, gracias a Regino Hernández en snowboardcross y Javier Fernández en patinaje artístico.
– Broche de oro –
Queralt Castellet pone un broche de oro a una carrera en la que se le escapaba la medalla olímpica, después del bronce que ganó en el Mundial de Aspen en 2021 y la plata lograda en el mismo evento en Kreischberg en 2015.
Pero llegaba a Pekín «en mi mejor momento», había prevenido esta semana antes de la cita olímpica, después de los cuatro podios en las pruebas de esta temporada.
La guinda al pastel la puso la plata olímpica en Pekín.
Chloé Kim, de apenas 21 años, tuvo de nuevo su día e impidió ganar el oro a Queralt.
Tras la puntuación de en su primera ronda, se puso a llorar de emoción, consciente de que acariciaba el oro.
«Estaba orgullosa de mí misma. Las prácticas no habían ido muy bien y estaba nerviosa, con presión. Cuando completé bien esa ronda, me pudo la emoción», dijo la estadounidense.
Kim y Castellet ganaron medallas y derrotaron a la presión.