La tenista japonesa Naomi Osaka declaró que tuvo “mucho miedo” después de ver a su adversaria Daria Saville caer, lesionada de una rodilla, tan solo siete minutos después del inicio de su partido del martes en el Torneo WTA de Tokio.
La australiana tuvo que retirarse al inicio del partido de primera ronda, después de lesionarse la rodilla izquierda mientras golpeaba la pelota en el segundo juego del primer set.
La N.55 del mundo gritó entonces “mi rodilla” antes de caer al suelo, sufriendo aparentemente mucho. Osaka corrió a su lado de la pista para interesarse por su estado.
Saville, de 28 años, formalizó su abandono después de varios minutos de tratamiento y Osaka, que también ha sufrido lesiones esta temporada, declaró que se sentía “verdaderamente triste” por su adversaria.
“Pensaba que gritó simplemente porque creía que su disparo había salido fuera, luego me di cuenta de que gritaba porque tenía dolor”, continuó la ex número 1 del mundo, que busca poner fin a su bajada de nivel esta semana en Tokio. “Después tuve mucho miedo, porque tengo la impresión que, como atletas, tenemos una tolerancia al dolor bastante alta. Tenía muy mala pinta”.
Saville se levantó finalmente y caminó hasta una silla, pero abandonó después de haber probado su rodilla con varios ejercicios de juego de piernas. Osaka indicó que creía que Saville “iba a salir adelante”, añadiendo que es “una luchadora”.
La jugadora de 24 años, caída al N.48 del ranking WTA se enfrentará a la brasileña Beatriz Haddad Maia en segunda ronda el jueves.
“Por el momento, me siento todavía un poco rara por haber ganado un partido. Tengo la impresión de no haber ganado”, subrayó Osaka, quien ha perdido la primera ronda de sus tres últimos torneos.
La nipona es la vigente campeona en Tokio, incluso si la edición precedente tuvo lugar en 2019 debido a la pandemia.
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